Sección 4: De la sociedad política
Integrantes del equipo: Luis Gerardo Solís Moreno, Gabriel Ángeles Austria, Gustavo Castillo Olea
El surgimiento de la sociedad
Pregunta principal:
¿Por qué es necesario que exista la sociedad política?
1. Los hombres no tenemos la sagacidad suficiente para percibir en todo momento el fuerte interés que nos ata a la observancia de la justicia y equidad. ¿Cuál es el interés que, según, Hume, nos debe atar a la observancia de la justicia? Un interés común y no particular, en virtud de la utilidad pública.
2. Nuestro vigor mental tampoco es suficiente para perseverar en una adherencia firme a un interés general y distante, en oposición a los encantos de las ventajas y los placeres del momento.
Si de tales facultades estuviera dotado el hombre en su estado de naturaleza, nunca habría existido una cosa tal como el gobierno o la sociedad política, sino que cada hombre al seguir su libertad natural hubiera vivido en completa paz y armonía con todos los demás.
¿Cuál es el estado de naturaleza?
“El estado de naturaleza se describe como un estado de guerra y violencia mutuas, y que está acompañado de la necesidad más extremada. Se nos dice que en los primeros tiempos de la humanidad prevalecían tanto su ignorancia y su naturaleza salvaje que no podían confiar los unos en los otros, sino que cada uno tenía que depender de sí mismo y de su propia fuerza o astucia para lograr protección y seguridad. No se sabía de ninguna ley: no se conocía ninguna norma de justicia. No se tenía en cuenta ninguna distinción de propiedad. El poder era la única medida de derecho; y una lucha continúa de todos contra todos era el resultado de la barbarie y del egoísmo de los hombres.”
Dadas las circunstancias en las que el hombre se encuentra en su naturaleza surge la necesidad de conformar una sociedad política al unir su fuerza con la de otros que sea capaz de llevar a cabo proyectos para lo que el solo no tiene el poder suficiente; que asegure mediante reglas de justicia sus propiedades y la paz entre los ciudadanos.
Conclusión
“Es evidente que si el gobierno fuera totalmente inútil nunca hubiera tenido lugar, y que el único fundamento del deber de la lealtad es la ventaja que procura a la sociedad al perseverar la paz y el orden entre la humanidad .”
Sociedad política y leyes de las naciones
Tesis: las reglas de la justicia que mantienen entre sí los individuos tienen similitud con las reglas que mantienen entre sí las sociedades.
¿Qué es una regla de justicia?
Las reglas de justicia son medidas de control que se establecen para poner fin a la disputa y la discordia entre los individuos, y para obtener ventajas y beneficios entre las sociedades. Una vez que han surgido las sociedades políticas y establecido sus límites, resulta muy útil o ventajoso crear un conjunto de reglas, sobre todo para aquellas sociedades que mantienen relaciones muy estrechas.
Semejanza entre las reglas de justicia de los individuos y las sociedades:
En ambos casos la observancia de la justicia resulta útil en tanto que trae ventajas para la sociedad al perseverar la paz y el orden. Así mismo, resulta útil para las relaciones entre las sociedades ya que trae ventajas entre ellas en situaciones como la guerra.
Diferencias:
1) La naturaleza humana no puede subsistir de ningún modo sin la asociación de individuos, y esta asociación nunca podría tener lugar si no se respetaran las leyes de la equidad y la justicia. Por lo tanto, el abandono de estas reglas de justicia supone la invalidez de cualquier tratado, y nada resulta más perjudicial para la sociedad que esto.
2) Las naciones pueden subsistir sin mantener relaciones entre sí; incluso pueden subsistir en alguna medida en una situación de guerra general. No obstante, cuando la observancia de las leyes entre naciones puede ser en alto grado perjudicial para cualquiera de las partes contratantes el abandono de este tratado no atenta contra la subsistencia de las sociedades políticas.
Consecuencias:
Puesto que la justicia y el gobierno son invenciones cuyo propósito es el beneficio humano, entonces, ¿es permisible suspender su obligación en casos extraordinarios y extremos?
De las asociaciones y de las sociedades de moralidad menor
Tesis: todas las asociaciones y relaciones entre los hombres que conforman la sociedad política tienen una utilidad peculiar, que en ultima instancia es la de conservar el orden y la seguridad, y, por lo tanto, también tienen reglas.
Premisas:
Todas las asociaciones que conforman la sociedad, tales como la familia, tienen la utilidad, en este caso, de conservar la sociedad misma y a los individuos. “La larga y desvalida infancia del hombre requiere la unión de los padres para la subsistencia de sus hijos” . Para que se preserven estas uniones y su utilidad es necesario que existan condiciones, reglas, cuya violación se consideraría como no menos criminal o incluso más que cualquier injusticia o perjuicio privados. Las reglas, leyes, normas y costumbres dentro de una sociedad tienen una utilidad pública que pretende ir hacia la armonización entre los individuos. Las condiciones de unión que tiene la familia son la castidad o fidelidad, y si no se hubieran considerado las ventajas que trae la observancia de estas reglas nunca se hubiera pensado en tales virtudes.
En el mismo caso, lo que se considera entonces como un vicio es aquello que puede transgredir el orden de dicha asociación e incluso dar pauta a su destrucción. La infidelidad es un vicio que atenta contra preservación de la familia. La infidelidad en las mujeres es más perniciosa que en los hombres, por la generación, y por lo tanto, las leyes deben ser más estrictas con ellas. Incluso en las mujeres entradas en años que ya no pueden procrear, estas leyes son igual de estrictas, por el ejemplo que le pueden dar a las mujeres más jóvenes.
Las sociedades existen y prevalecen en armonía mediante normas, leyes y otros factores como las costumbres de una nación. Todos los hábitos que son inconvenientes para la sociedad, para sus costumbres puras, sean las que fueren, o para el intercambio libre y sociable de opiniones, son hábitos igual de censurables. Este mismo principio, la conveniencia y utilidad, también es el fundamento para una clase de moralidad menor, calculada para la comodidad de las reuniones de personas y de la conversación. La utilidad que proporcionan las sociedades de moralidad menor es mantener la confianza y las buenas relaciones en la sociedad, no para la conveniencia pública sino para una especie de falso honor o de interés privado.
¿Cuál es la diferencia entre las sociedades de moralidad necesaria como la sociedad política y las de moralidad menor?
Las sociedades humanas son absolutamente indispensables para la subsistencia de la especie; y la conveniencia pública, que regula la moral, está establecida de forma inviolable en la naturaleza del hombre y del mundo en el que vive. Esto se aplica a las sociedades de moralidad necesaria, mientras que en las de moralidad menor las leyes que hacen posible tales relaciones son para la conveniencia de las mismas y son, además, en gran medida aunque no enteramente, caprichosas y arbitrarias.
Conclusión:
Es necesario que existan reglas donde quiera que los hombres tengan alguna relación entre sí. La guerra, por ejemplo, tiene sus leyes igual que la paz basadas en una idea de la justicia y el honor; los deportes y hasta en las relaciones entre los integrantes de una religión están regidas por principios fijos .
Conclusión general: Los principios que mantienen unidas a las sociedades políticas y a cualquier tipo de relación que son la utilidad y el interés común generan necesariamente un criterio de lo correcto y lo incorrecto, ajustable a los miembros que conforman dichas asociaciones.
Bibliografía:
Hume, David, investigación sobre los principios de la moral, tr. Jaime de Salas et al, Tecnos, Madrid, 2007